Vía de escape a una relación tóxica.

Desde que nacemos, nuestra meta en la vida es conseguir a alguien que nos quiera y ame por quienes somos. Cuando al fin esa búsqueda termina y encuentras al ser amado, te sientes la persona más feliz del mundo.
Pero como en toda relación, no todo siempre será color de rosa, habrá momentos difíciles y discusiones.
Sin embargo, si las discusiones comienzan a opacar a los momentos felices ¡Cuidado!
Podrías estar inmerso en una relación tóxica.

A veces cuesta identificar si es una crisis pasajera o si de verdad la relación es tóxica.

Aquí te presentamos los síntomas de la misma y cómo escapar de ella, ya que este tipo de relaciones no te hace ningún bien, son los siguientes:

Infidelidad.
Si tu pareja está buscando fuera de casa lo que no encuentra en la relación, es indicativo de que ya nada volverá a ser lo mismo entre los dos.

Control.
Si ya no haces cosas que te gustaban, no ves a tus amigos con la misma frecuencia de antes por complacer a tu pareja, es posible que te estén controlando. Las personas controladoras tienen una autoestima poco saludable, y te obligan a hacer lo que ellos quieren.

Pelear por pelear.
Cuando las discusiones son a cada momento es tiempo de cuestionarse para qué siguen juntos, si para compartir o para discutir.

Peor es nada.
Si este pensamiento cruza por tu mente cada vez que ves a tu pareja, es porque no te quieres. Si de verdad te quisieras buscarías a alguien que llene cada espacio de ti, y no solo alguien que te haga compañía y ya. Además, puedes hacer daño al otro, pues lo estás engañando al hacerlo creer que si lo quieres.

VÍDEO DE UNA RELACIÓN TÓXICA ⇓

Ahora que ya conoces los síntomas y lo perjudiciales que pueden ser: ¿Cómo se hace para salir de este tipo de relaciones?

1.- Cuestiónate.
Es importante que inviertas tiempo en conocer tus necesidades emocionales, conocerte a ti mismo. Así, podrás cuestionarte qué es lo que te motiva a seguir en una relación que solo te hace sentir mal y te genera infelicidad. Verás que son más las razones para irse que para quedarse.

2.- Pide ayuda a amigos.
La complejidad del proceso requiere a personas que te estimen y te motiven a dar el paso para poder abandonar esa relación.

3.- Sepárate.
Es el momento para tomar la decisión final. Es hora de dejar atrás todo lo que te ha causado dolor durante un tiempo. Al principio no verás los beneficios, pero poco a poco te darás cuenta que será la mejor decisión de tu vida.

Y combatir los Celos es una batalla perdida.
Los celos van de la mano con el control. Si sientes que tu pareja te cela hasta del gato del vecino, te prohíbe salir con gente por quienes se siente amenazado o le molesta que tú obtengas más atención cuando salen, tienes que hacer algo al respecto.

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